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La tragedia de Xalostoc desde la mirada  de un sobreviviente.

“Mi única reacción fue ayudar a sacar a la gente” dice Alejandro Morales, conductor de transporte público de la Ruta 30.
Con la mirada de asombro, uno de los sobrevivientes de la trágica escena  que llenó de luto a los mexiquenses, cuenta para ENTER su experiencia.

“Cuando volteé a ver la camioneta, como vi que la gente se estaba bajando, pensé que hasta incluso había explotado, porque era fuego y fuego, y cuando volteo y veo gente, pues no pensé. Mi única reacción fue ayudar a sacar a la gente, o sea, no piensas, yo creo que si lo pienso, no regreso, o quién sabe, porque aunque haya pasado la onda expansiva, estaba todo prendido a su paso, ya había llama y entonces llegó a la camioneta y bajamos a los que faltaban y mi camioneta ya se estaba en llamas, de enfrente, de lado derecho. Ya los bajamos a todos y vámonos, en ése momento oí que gritaba la gente, pero horrible (sorprendido) pero yo pensé que se habían caído carros, porque gritaban de lado de abajo y había una malla y mucha gente decía, vamos a bajar a ayudar, porque mucha gente pedía auxilio, y en eso se escucha otra explosión, creo que fue un carro, o sea, porque después de ahí, empezaron a sonar los tanques, pero esos se oían como cohetitos blancos, a comparación de los otros y luego se  escuchó otra más fuerte y entonces mejor nos regresamos, porque ya se estaba propagando por todo el lugar, entonces ya fue cuando nos retiramos” dijo.

Alejandro Morales, logra ayudar a cinco personas, teniendo en mente la imagen de su bebé con quien no había convivido mucho, pero en esos momentos sólo era ayudar, dejó que sus instintos y adrenalina actuaran, al igual nos dice que no hubo víctimas que 



 

 

lamentar en su camioneta. Sin embargo; si hubo una señora que se quemó un poco las manos, ya que al querer bajar, cae y se quema debido a que el suelo estaba hirviendo. 

Cuando pasa el momento de tensión, todos reunidos y sin poder hacer nada por la gente que se encontraba ahí, se preguntaron unos a otros cómo se encontraban todos, es cuando el conductor se desvanece por un momento y es asistido junto con la señora a un hospital de Ecatepec, ubicado en Las Américas, donde lo dan de alta el mismo día.
Comenta que durante el suceso, tuvo que esperar alrededor de media hora para ser trasladado al hospital, siendo que no llegó alguna ambulancia. La gente lo ayudó a cruzar la autopista para trasladarlo en una camioneta particular.
Siete días después del accidente recibe una ayuda económica por parte del gobierno y el 31 de Mayo cobra ayuda por parte de la aseguradora de la pipa de gas, aunado a la firma que lo exime de cualquier culpa.

Una de las repercusiones que ha traído el suceso para el señor Alejandro Morales es el no poder dormir, debido a las imágenes recordadas. Asimismo, las marcas del fuego sobre su piel no es algo que le incomode, lo importante es que estoy vivo y afortunadamente completo, dijo. 

“Gracias a Dios, me da gusto que me vengan a visitar, se siente padre que te apoyen; algunos vecinos me trajeron despensa, otros su granito de arena, no sé si eso sea bueno o malo, porque al final de cuentas, lo estás sacando”.
 



 

 


 

Actualmente, debido a los gastos que se le han presentado, el conductor de la unidad de transporte público, se ha movilizado en la búsqueda de una nueva camioneta que ayude al ingreso económico de la familia.

En palabras del señor, los accidentes pueden pasar en cualquier momento, sólo decirle a mis compañeros que tomen consciencia porque luego van a exceso de velocidad, sales de tu casa y no sabes si vas a regresar.

 

En palabras del señor, los accidentes pueden pasar en cualquier momento, sólo decirle a mis compañeros que tomen consciencia porque luego van a exceso de velocidad, sales de tu casa y no sabes si vas a regresar.

 

 

 

Parte dos.

Por E N T E R.

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